martes, 12 de julio de 2011

Lecciones de economía para tontos (I)

Pese a que hay quien considera que la crisis es un tema opinable o que ya estábamos saliendo de ella,  (aquí de viva voz) en el 2009, la triste realidad es que estamos viviendo una crisis tamaño XXL. Pero, ¿por qué se ha producido esta crisis? Para tratar de entender su origen, tenemos que ver cómo funciona la economía con un ejemplo muy simple.

Me precio de tener un bar donde por un euro te puedes comer un bocata de jamón de muerte con una buena caña. Entiendo que puede parecer algo caro, pero bueno para algo están los bancos. De manera que si el bueno de Alberto quiere tomarse su bocata lo único que tiene que hacer es ir al banco, pedir un préstamo y venirse a mi bar. Me paga mi euro, él se lleva su bocata, se lo come, me paga mi euro, y yo corro a depositar mi euro en el banco no sea que me lo roben. Como no hay mejor publicidad que el boca a boca, Alberto se lo dice a Braulio, Braulio a César, César a Damián y Damián a Enrique. (Vamos a pararnos ahí para no aburrir al personal). Hay que entender que en todos los casos se ha hecho la misma jugada: se pide un euro prestado, el mismo euro se ha depositado en el banco y, muy importante, el bocadillo se ha comido. En resumen, se han vendido cinco bocadillos y en el banco se han ingresado cinco euros pero tan solo había un euro real. Aquí tenemos el primer puntal de la economía moderna: el crédito. Hay que entender que cuando pedimos un crédito, lo que hacemos es traernos dinero del futuro, de manera que tenemos que ser conscientes que en el futuro no vamos a contar con ese dinero.

Naturalmente el chiringuito funcionará razonablemente mientras se den dos condiciones:

1. A mi no me dé por sacar de golpe mis cinco euros del banco.
2. Alberto, Braulio, César, Damián y Enrique puedan devolver el euro al banco.

Dado que la primera condición es consecuencia de la segunda, el banco se preocupaba muy mucho de la solvencia de Alberto et al.

Mientras las cosas funcionen así, no hay que nada que temer yo seguiré haciendo mis bocatas de jamón y la rueda del dinero seguirá rodando. Pero, ¿qué ha ocurrido en estos últimos años?. Pues para empezar que detrás de Enrique llegó Francisco, quien acuciado por el hambre, y aprovechando que tenía ahorrado 10 céntimos, decidió comprarle a Enrique su bocata por 1,10. Naturalmente todos, incluido yo, vimos la jugada. Germán, que espera su turno pacientemente detrás de Francisco, compró dos bocatas uno para él y otro para el impaciente que le seguía en la cola, pero claro, uno no es tonto y se dijo para que sea otro el que se gane los diez céntimos, me los gano yo, y subí el precio a 1,10. Heriberto, viendo la jugada, decidió comprar tres bocatas, para revenderlos a 1,25, y claro pues para que gane él, gano yo, y el precio subió a 1,25. La noticia corrió como un reguero de pólvora y César que aún no se había comido su bocata lo vendió por 1,35. Ahora todo el mundo estaba en el ajo. Para empezar el negocio era seguro: todos tenemos que comer, por lo tanto es imposible que los precios de los bocatas bajen. Los bancos empezaron a ver el negocio. Ya no trataba de verificar la solvencia del que compraba el bocata, si no del bocata en sí. Al fin y al cabo si no podía devolver el dinero, el banco le embarga el bocata y lo vendía por un valor mayor que el del préstamo.

Aquí estoy omitiendo un pequeño detalle. Cuando hacía los bocatas para ser comidos, procuraba que sus ingredientes fueran de la mejor calidad ya que eso era la garantía de mi éxito. Pero al comprobar que mis bocatas solo pasaban de una mano a otra, sin ser probados, dejé de preocuparme por la calidad de la materia prima. Total, ¿para qué? si nadie se los iba a comer. Menos coste y mayor beneficio para mi menda.

Y así llegamos a una situación donde Aurelio tiene cinco bocatas; Braulio, cuatro; César, siete; Damián, seis y Enrique, ocho. También está Ignacio, quien no tenía crédito para comprarse el bocata cuando solo costaba un euro, pero que ahora, milagrosamente, ha conseguido que el banco le financie la compra de dos, a tres euros cada uno. También está Jacinta, quien tenía su bocata de cuando era joven y solo costaban 30 céntimos. Decidió avalar a sus dos hijos con el suyo. Curiosamente tampoco ninguno de ellos tenía crédito para comprarse el bocata, pero como ahora todo el mundo se estaba comprando uno, ellos no iban a ser menos. Además se lo compraron con tomate, cuatro de euros de nada. Pero bueno, como ella decía:

- Y si no pueden pagarlo, seguro que lo venden por más de lo que les ha costado. O si no lo alquilan, y con lo que sacan de alquilarlo pagan la letra del bocadillo. Y en el peor de los casos, que se lo lleven al banco y que el banco se las apañe.

Llegado a este punto alguien debería haberle dicho que mirase en el diccionario que significaba la palabra avalista.

En resumen: hay un único euro real circulando y no se sabe cuantos euros a crédito. Pero claro esos euros a crédito hay que devolverlos…

Volviendo con Aurelio et al.  Por si a alguien se le había olvidado su solvencia era de un euro, pero ahora, de media, tienen que devolver seis. Como no pueden pagarlos, el banco comienza a acaparar bocatas, y la gente se indigna porque los bancos están quitando los bocatas a la gente y la gente no tiene que comer.

Gente que se había comprado unos bocatas que sabía de sobra que no podía pagar. Gente que aprovechando que le daban más que lo que costaba el bocata, se compraba el tabaco y se sacaba un par de entradas para el cine, con sus correspondientes palomitas. Gente que presumía de lo lista que era porque se había comprado un bocata a dos euros y que cuando quisiera lo podía vender por cuatro. Gente que no era, o no quería ser consciente, de que los bocatas son para ser comidos y que con uno que te comas tienes bastante para todo el día y no para especular con ellos, porque con las cosas de comer no se juega.

¿Y que ha sido de mí? Bueno, pues alentado por las perspectivas, y dado que siempre he sido un hombre con una gran visión de futuro, decidí que no podía quedarme solo con el bar. Así que me fui al banco con intención de montar una cadena. Pedí un préstamo de solo 1000 euros avalado, como es lógico, por la propia cadena. Naturalmente, Aurelio et al, al deber seis euros tienen un problema con el banco, pero en mi caso el problema lo tiene el banco.
(Continuará)

viernes, 1 de julio de 2011

La II República y los mundos de Yupi (II)

Cuando empecé con este tema hace más de un año, mi idea era ir mostrando, poco a poco, lo que verdaderamente fue la II República. No voy, a estas horas a poner excusas, pero la buena noticia es que aquí, JdJ lo ha hecho por mí, y mucho mejor de lo que yo hubiera hecho.

Os recomiendo encarecidamente que leáis todas las entradas.

A modo de conclusión diré que, para mí, en febrero de 36 lo que se votó fue qué media España, podía matar impunemente a la otra media. Y la media que perdió, pues como que no estuvo por la labor de dejarse matar. ¿Qué hubiese pasado si hubiese ganado la derecha? Pues pueden hacerse una idea si leen estos párrafos entresacados de las noticias que dio La Vanguardia del proceso a Largo Caballero en noviembre de 1935:

... Andrés Escudero Mota, chófer, sometido a proceso, manifiesta que era jefe de una sección de ametralladoras del Partido Socialista, y afirma que nunca había tratado al señor Largo Caballero...

... El señor Largo Caballero no dio órdenes a las milicias socialistas, según afirma el fiscal...

Hablamos de 1935, no de julio del 36...

Me preguntó quien será el actual jefe de la sección de ametralladoras del Partido Socialista o el responsable de sus milicias.

Por cierto, el fiscal del proceso, Marcelino Valentín Gamazo, fue asesinado junto con sus tres hijos al inicio de la Guerra Civil.

Aún hay más. Como internet te permite acceder consultar periódicos de otras fechas sin moverte de casa aquí tenéis unas noticias de última hora.


Es un fragmento de la página siete del diario el Sol de Madrid de fecha 10 de mayo de 1936. Que conste que el día está tomado al azar. En ella se habla del entierro de un militar asesinado en Madrid por unos pistoleros. Me llama la atención varias cosas. La primera la ubicación de la noticia. ¡Hablamos de la página siete!. Naturalmente en portada figuraban noticias tan relevantes como que:
El Emperador de Abisinia, que se encuentra enfermo por los efectos de los gases, se propone trasladarse a Londres
o
Que el dirigible  "Hinderburg" ha hecho la travesía Europa-América en sesenta y dos horas
o esta otra, fechada en Londres, que si que es buena:
El laboralismo y el liberalismo muestran deseos de benevolencia hacia Alemania a la que consideran víctima de un trato injusto.
Pero bueno a lo que íbamos. El entierro transcurrió sin incidentes (¿El que un entierro transcurra sin incidentes es digno de mención?) y también se verificó el entierro de Bruno Ponce y Juan Palacios López muertos en los sucesos ocurridos hace días en los Cuatro Caminos

El último párrafo dice:
El Sr. Carrillo en su disertación hizo un llamamiento a los militares republicanos para que se unan con los proletarios para dar la batalla a los enemigos de la República

Una foto es el reflejo de un instante. Tratar de entender una vida a través de una foto tiene más de poesía que de ciencia y de igual modo pretender resumir cinco años de vida de España por un recorte de periódico es pretender simplificar la realidad en grado sumo. Pero en cualquier caso, cuando en un país, el entierro de un militar asesinado solo se merece una esquina en una página pérdida o cuando ese mismo entierro se convierte en un mitín, y se llama a los militares que se unan a la lucha con el proletariado es señal de que la violencia política se ha convertido en algo cotidiano, de que se está tramando algo y de que el Gobierno no está haciendo sus deberes.

Si alguien tiene interés en saber, de primera mano, algo mas de aquella época aquí están los enlaces para consultar prensa antigua sin salir de casa:

Prensa Histórica

Hemeroteca Biblioteca Nacional